La SAREB: Venta de activos inmobiliarios y finacieros

SAREB¿Qué sabemos de la SAREB? Porque todos conocemos que se trata de una Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria. Y que está formada en un 55% por veintisiete accionistas (bancos, cajas, aseguradoras, etc.) y en un 45% por el Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria (FROB) que es propiedad del estado.

Pero además debemos tener presente que, la SAREB dispone de 15 años para vender la gigantesca cartera de activos inmobiliarios y financieros que le han sido trasferidos por los bancos y cajas intervenidos por el Estado. Se trata en total de 197.474 activos, divididos en 106.856 unidades de activos inmobiliarios (viviendas vacías, alquiladas y suelos) y 90.618 de activos financieros (préstamos).

Para alcanzar el reto de la venta de todos sus activos inmobiliarios y financieros, la SAREB va a desarrollar una estrategia basada en tres ámbitos diferentes que incluyen: el mercado minorista, el mayorista, y las operaciones singulares.

En el área minorista, la venta de las 76.357 viviendas vacías ha sido designada parcialmente a los bancos, que han abierto líneas de hipotecas bonificadas a sus clientes sobre esos activos inmobiliarios en particular.

Además, la SAREB ha decidido también vender directamente al por mayor a operadores financieros o inmobiliarios. Operaciones que bien se realizaran mediante venta directa o a través de los FAB (Fondo de Activos Bancarios) que están participados por la propia SAREB y un inversor institucional.

“Se trata de operaciones que se realizan sobre paquetes de activos homogéneos de promociones recién terminadas, sin habitar y especialmente en la costa o sobre paquetes de suelo finalista o de préstamos”, explica Walter de Luna, Director General de la SAREB, al diario El País.

Por otro lado, la tercera iniciativa pasará por los activos singulares, hoteles, centros comerciales y edificios de características similares.

Con lo que se puede establecer que no será sencillo deshacerse de todos estos activos, no solo los inmobiliarios, también los financieros, así como particularmente todo lo que es el suelo o las viviendas sin terminar. Aun así, y en declaraciones al citado periódico, la SAREB no se muestra preocupada ante las perspectivas de futuro, y confía en sacar adelante todo el patrimonio puesto en juego.

Share on FacebookShare on Google+Tweet about this on TwitterShare on LinkedInEmail this to someonePrint this page