Profesionales sin los conocimientos necesarios sobre el proceso de venta de una vivienda. Agencias inmobiliarias creadas en un día. Malas praxis y estafas. Son sólo algunos de los ingredientes del panorama inmobiliario. Pero tiene los días contados ¿La solución? Una mayor profesionalización del sector inmobiliario gracias a la normativa y la formación.
El crecimiento del sector inmobiliario, un imán para el oportunismo
No es novedad que el sector inmobiliario se encuentra en pleno crecimiento y ha recuperado los niveles precrisis. Con un volumen de crecimiento de profesionales de un 70% en cinco años, la profesionalización del sector tiene sus luces y sus sombras.
Unas sombras que se caracterizan por la atracción de profesionales sin formación debido a las altas comisiones y la –aparentemente-fácil y rápida rentabilidad.
Decimos aparentemente porque esta rentabilidad tan solo presenta sencilla a ojos de los profesionales sin formación. Y es que vender sin conocimiento entraña peligros, tanto para el comprador, propietarios, la propia agencia y la sociedad, ya que el ladrillo presenta un peso muy importante de la economía.
Así, el panorama de profesionales sin formación se presenta desolador. Tan solo el 20% de profesionales están debidamente preparados. Hasta ahora.
Ya que los principales organismos del sector comienzan a tomar cartas en el asunto y exigir la profesionalización de un colectivo de gran importancia.
Pero no solo eso, mientras que las agencias piratas no exigen titulación, las agencias profesionales exigen un nivel de formación para poder ejercer como experto y asesor inmobiliario.
De esta manera, mientras que las agencias sin experiencia en el sector no tardan en sobrevivir, aquellas que sí cuentan con la profesionalización pertinente sí perduran en el tiempo a pesar de las idas y venidas. Porque el conocimiento y la formación es sinónimo de consolidación y crecimiento.
Hacia una mayor regulación en el sector inmobiliario
Las organizaciones y empresas profesionales del mundo inmobiliario llevan años reclamando que se regule el sector.
Una regulación exigida a raíz de los escándalos en el mundo inmobiliario, las malas praxis y el funcionamiento de un sector amateur que entorpece la dinámica del sector, alejando a propietarios e inquilinos de los servicios de una agencia.
Los clamores por parte de los expertos en el sector comienzan a materializarse en normativas y regulaciones. Como ejemplo en Cataluña fue la primera comunidad en crear un registro con normas de acceso para agentes inmobiliarios, pioneros en el año 2010, y con un éxito en la propuesta diversas comunidades no han tardado tomar ejemplo.
Así, Andalucía ha implantado su propio registro basándose en el modelo catalán.
Por otro lado, Madrid, País Vasco y Navarra también cuentan con registros, aunque son voluntarios, aunque los expertos consideran esta medida insuficiente.
Tal y como apunta al diario El Confidencial Diego Galiano, profesor del sector inmobiliario y presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de la Propiedad Inmobiliaria en España (CGCOAPI): . “No queremos que se elimine el mercado libre, pero sí establecer normas como sucede en toda Europa. El mercado es más libre con normas”.
Asimismo añade: “Queremos un modelo basado en cuatro puntos. Capacitación de los profesionales, obligación de tener un local y solvencia económica, que al menos sean obligatorios un seguro de responsabilidad civil, para los daños a terceros, y otro de caución que proteja las entregas de dinero a cuenta. Por último, la revisión de los antecedentes penales, para evitar que los delincuentes reincidan, que es algo que ahora sucede”.
Con unos puntos muy específicos en sus exigencias, los profesionales del sector como Diego Galiano no cesan en su intento de profesionalizar el sector, y por el momento lo están consiguiendo.
La necesidad de crear un registro parece ser solo un comienzo que esperemos avance hacia una dirección más organizada, donde la responsabilidad civil y la formación tienen un impacto directo en la mejora de un sector dañado por la mala imagen de los profesionales sin los debidos conocimientos.
Formación Profesional Personalizada en el sector inmobiliaria
El Curso de Asesor Inmobiliario (título propio de Fundación Aucal) con 480 horas y nueve meses de duración, permite al alumno formarse como Asesor Inmobiliario.
El temario del mismo ofrece una formación integral para que, al terminar el curso, el alumno sea capaz de llevar a cabo todas las etapas de una gestión inmobiliaria. El plan de estudios incluye Derecho Inmobiliario, Valoraciones inmobiliarias, Marketing y Deontología profesional, entre otros.
Con el seguimiento de un profesorado universitario activo en el sector y conocedor de la realidad del mismo, el alumno podrá, por su cuenta, o como parte de una empresa: dirigir, gestionar, rentabilizar una empresa inmobiliaria, elaborar el plan de negocio inmobiliario, planificar la promoción de la marca y del catálogo de propiedades y muchas otras responsabilidades afines.
Realmente la formación es clave en la profesionalidad, que hoy por hoy no está. Está fenomenal que se empiece a regular este tema. Un saludo.
La profesión de agente inmobiliario es una profesión que necesita formación como cualquier otra, en Cataluña ya se está regulando y creemos que así debería ser en elr esto del país. Buen artículo, felicidades.